Producto de su crecimiento institucional, a partir de la realización de alianzas estratégicas, y del intenso trabajo para el desarrollo social y ambiental, la Fundación ha firmado un compromiso para apoyar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
El Pacto Global de las Naciones Unidas (UN Global Compact) es un instrumento de libre adhesión para empresas y organizaciones de la sociedad civil, cuyo fin es promover e incorporar 10 principios en materia de derechos humanos, trabajo, medio ambiente y anticorrupción. Las organizaciones firmantes se comprometen además a apoyar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): un conjunto de objetivos globales para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar el crecimiento económico para todos como parte de una nueva agenda de desarrollo sostenible. Los 17 Objetivos deben alcanzarse para el 2030 y necesitan del compromiso de los Estados, el sector privado y las organizaciones de la sociedad civil: entre ellas, las iglesias y organizaciones ecuménicas.
Es por eso que, desde el mes de marzo de 2017, Fundación Protestante Hora de Obrar forma parte del Pacto Global de las Naciones Unidas y suscribió a los 17 ODS comprometiéndose a trabajar de acuerdo con ellos. Nuestra Responsable de Desarrollo Institucional, Florencia Freijo, envió a la ONU un extenso documento donde presentó una serie de metas concretas a alcanzar en el territorio de incidencia y junto con las poblaciones y comunidades acompañadas por la Fundación, en relación con cada uno de los 17 Objetivos. Entre ellas se destacan:
Fomentar la resiliencia de personas en situaciones de vulnerabilidad y reducir su exposición y riesgo a los fenómenos extremos relacionados con el clima y otras perturbaciones y desastres económicos, sociales y ambientales.
Apoyar y desarrollar proyectos que mejoren la productividad agrícola y los ingresos de los productores de alimentos en pequeña escala, en particular las mujeres, los pueblos indígenas, los agricultores familiares, los ganaderos y los pescadores, mediante un acceso seguro y equitativo a las tierras, a otros recursos e insumos de producción y a los conocimientos, los servicios financieros, los mercados y las oportunidades para añadir valor.
Otorgar una comida diaria a manera de desayuno, almuerzo, merienda o vianda, en los espacios de recreación/educación de los centros barriales donde trabaja.
Desarrollar y ampliar el programa de educación sexual integral y salud sexual y reproductiva, con énfasis en enfermedades de transmisión sexual incluidos el VIH/SIDA.
Alcanzar la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y niñas.
Asegurar el acceso a energías asequibles, fiables, sostenibles y modernas para todos.
Fomentar el asesoramiento que puedan ejercer los coordinadores de grupos locales, dentro de los espacios comunitarios, para facilitar el acercamiento y la articulación con organizaciones locales y públicas que garantice el acceso a subsidios y a oficinas de fortalecimiento.
Fortalecer el trabajo con Poblaciones Indígenas en el uso de los suelos, mediante la utilización de semillas autóctonas que mitiguen los efectos de los agroquímicos, y las problemáticas que se desprenden para pequeños y medianos productores en el patentamiento. También se busca mitigar el uso de transgénicos.